Cómo evitar las trampas que los restaurantes le ponen a tu dieta
Ya que seguramente no quieres dejar de comer fuera de casa por completo, aprender a esquivar un menú y a “comer de manera responsable” son habilidades que valen la pena dominar.
Si comes fuera de casa solo unas pocas veces al año, te diría que disfrutes lo que sea del menú. Comemos aproximadamente un tercio de nuestras comidas fuera de casa; sin embargo, vale la pena poner atención a estas trampas comunes en los restaurantes y a los consejos para evitarlas.
- No te alejes de tu plan alimenticio habitual. Ten un plan alimenticio general en mente y apégate a él. Si por lo general comes una combinación de proteínas, vegetales y ensalada para el almuerzo, busca algo similar en el menú y no dejes que tus ojos se dirijan a la sección de sándwiches o pastas.
- Ten cuidado con los alimentos que parecen ser más saludables de lo que son. Los sándwiches pueden ser saludables si están hechos con carnes magras, vegetales y pan integral. Lamentablemente, las calorías de un sándwich aumentan rápidamente con ingredientes como el queso y la mayonesa, o si el sándwich mide un pie. También ten cuidado con las ensaladas que parecen saludables. Una ensalada china de pollo puede acumular más de 1,000 calorías, gracias a los fideos fritos crujientes y el aderezo.
- Cuidado con los especiales del día. Es posible que te ofrezcan el plato especial del día con una irresistible descripción, así que ten cuidado. Muchos de estos platos especiales no se pueden modificar, así que no podrás evitar el aderezo, la salsa, o pedir el pescado a la plancha en lugar de frito. Si el plato especial está a la altura, genial, pero como primera opción elige algo del menú para que tengas un respaldo.
- No caigas en la trampa de las porciones grandes. Mantente firme si te ofrecen más comida de la que quieres, incluso si parece que el precio lo vale. Cuando te digan: “Solo por un dólar más, puedes añadir papas fritas como guarnición”, piensa: “Solo por un dólar más, tendré 600 calorías más y 40 gramos adicionales de grasa”.
- Lee con atención los conteos de calorías en los menús. Algunas investigaciones han demostrado que las calorías en los menús son 20% más altas de lo que especifican. También, los restaurantes en ocasiones indican el conteo de calorías de los artículos por separado en lugar del conteo de las comidas completas como las sirven. Así que, cuando estés tomando nota de las calorías del plato principal, no olvides añadir las calorías de las guarniciones.
- Las porciones de los restaurantes pueden ser enormes. Divide un plato principal con tu acompañante y pide una orden extra de guarnición de vegetales, o pide lo que te quedó para llevar tan pronto como hayas terminado tu porción. Cuando hablamos de porciones grandes, los restaurantes pueden permitírselas, tú no.
No te sientas como si nunca pudieras comer fuera de casa. Un estilo de vida ocupado más el simple gusto de probar nueva comida en un nuevo ambiente hace que el salir a comer ocasionalmente sea una elección saludable para la salud emocional y mental. ¡Considera eso junto con los consejos anteriores y estarás preparado(a)!
